Hace
unos días fue cumpleaños de una querida amiga con quien compartí gran parte de
mi infancia y adolescencia, mientras le enviaba un mensaje felicitándola
únicamente podía recordar un breve instante en nuestra escuela, tendríamos unos
5 ó 6 años y mientras cantábamos y rezábamos en nuestra formación matutina
veíamos como una señora se pintaba los labios de color rojo, pasaba una y otra
vez su lápiz labial hasta dejar su boca de un color sangriento que a mi amiga y
a mí nos provocó risa por años, ese recuerdo aún nos hace reír, ese recuerdo y
muchos más nos mantiene unidas.
En
días en los que únicamente escuchamos sobre personas desaparecidas, abusos,
desigualdad, terror mundial, considero es nuestra obligación buscar los
momentos de solidaridad, de perdón, de paz, de amor, encontrar esos espacios
para reír, para relajar al espíritu, para brindarle un soporte con la belleza que
regala lo simple, lo puro.
Vi
una hermosa película, donde un pequeño aferrado a su gramo de mostaza y a una
lista de sencillos favores ve transformado su entorno.
Llámenlo
fe, circunstancias, coincidencias, lo cierto es que el poder de creer sumado a
la alegría de querer creer terminan por generar la mejor de las energías del
planeta: la Risa. Ese momento que guardarás siempre, porque REÍR y si se puede
a carcajadas te dará la fuerza que necesites cuando lleguen días de prueba.
LÓPEZ-ARRIAGA
1 comentarios:
Excelente para reflexionar me encanta mi bolsa de valores ����
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